Mariana Muñoz-Romo destapa un tubo de plástico transparente y lo mueve bajo mi nariz. El contenido, una pasta seca y amarilla llamada costra olorosa del antebrazo, recolectada de un murciélago macho, huele vagamente a incienso.

"A las mujeres parece gustarles el olor y, en general, los hombres lo detestan", comentó Mariana, becaria postdoctoral en el laboratorio de murciélagos de Rachel Page en STRI. "La gente comentó que las costras huelen a almizclado, dulce, afrutado o floral".

En el 2017, la estudiante de doctorado Victoria Flores, que trabajaba en el mismo laboratorio, escribió el primer artículo describiendo esta sustancia misteriosa, parecida a una brea, en los antebrazos de los murciélagos de labios con flecos (Trachops cirrhosus). Durante tres años de captura de estos murciélagos para otro experimento, Flores se dio cuenta de que solo los machos adultos maduros con testículos grandes tenían costras en los antebrazos. Además, las costras eran más comunes durante los últimos tres meses del año, cuando los murciélagos parecían estar apareándose. Esto llevó a Victoria a creer que las costras pueden ser importantes para atraer a una pareja.

"Prefiero no llamarlos machos costrosos, porque suena irrespetuoso", comentó Mariana, "pero solo algunos de los machos parecen desarrollar estas costras, y queremos saber por qué".

En todo el reino animal, los machos ponen mucha energía para impresionar a las hembras. Hacen alarde de plumajes fabulosos, como la cola del pavo real; de pelaje adicional, como la melena de un león macho, y dientes o colmillos de gran tamaño, para demostrar su fuerza y ​​superioridad. Y debido a que los murciélagos pasan la mayor parte de su tiempo activo en la oscuridad, tiene sentido que los murciélagos machos puedan usar el aroma para atraer a las hembras.

Además de ayudar a un murciélago a reconocer a otro, los olores también son anuncios de la condición física de un murciélago. Las parejas potenciales a menudo pueden saber si otro murciélago ha estado comiendo recientemente o si está enfermo, según su olor.

Pero cuando Victoria y Rachel se dispusieron a descubrir si las costras eran importantes como señales para posibles parejas, llegaron a un callejón sin salida.

Victoria montó un laberinto para descubrir cómo reaccionan los murciélagos ante sus camaradas crustosos. Los murciélagos podían elegir arrastrarse por uno de los dos tubos en un laberinto en forma de Y hacia el olor de otro murciélago. Pero, al contrario de lo que predijo, las hembras no se movían hacia el olor de un macho con costras en el antebrazo. Y los machos prefirieron acercarse al olor de los machos sin costras. Victoria publicó sus hallazgos y siguió adelante.

Mientras tanto, Mariana, entonces profesora de zoología e investigadora/directora del Laboratorio de Zoología Aplicada de la Universidad de Los Andes en Mérida, Venezuela, decidió abordar el caso. Durante su doctorado en el laboratorio de Thomas Kunz en la Universidad de Boston, estudió el murciélago longirostro (Leptonycteris curasoae), que tiene un parche de pelo piel oloroso en la espalda. Los murciélagos hembra se sintieron atraídos por los recintos que contenían muestras del olor del parche.

"Hay varias posibles explicaciones distintas para este tipo de perfume en los murciélagos de labios con flecos", comentó, "pero en este momento, todavía no sabemos qué es la sustancia, de dónde viene o para qué sirve". Sin embargo, agrega: "el hecho de que este rasgo oloroso solo esté presente en los machos adultos que muestran testículos grandes, tenga algunos compuestos químicos idénticos a los presentes en los parches dorsales y se desarrolle de manera más notoria durante la corta temporada de apareamiento, es evidencia que respalda una posible función de apareamiento/atracción".

Según su trabajo hasta ahora, es probable que la idea de Victoria y Rachel de que las costras sean importantes para el apareamiento sea correcta.

"La intensidad de los olores en algunos animales está relacionada con la testosterona, una hormona sexual masculina, por lo que mi primer experimento fue preguntar si había una relación entre el tamaño de la costra y los niveles de testosterona en los machos". Para determinar los niveles de testosterona, ella tomó pequeñas muestras de sangre, siguiendo los estándares internacionales de atención veterinaria. Y descubrió que, en general, cuanto más testosterona, más grande es la costra.

A continuación, investigaré si las hembras que están listas para aparearse se sienten más atraídas por los machos con costras que las hembras que no son reproductivas".

Determinar exactamente cuándo las hembras están en celo es complicado. El año pasado, examinó las células de la cavidad vaginal de murciélagos hembra, recolectadas utilizando pequeñas puntas de pipeta. Las células vaginales cambian de forma a medida que las hembras se vuelven más fértiles, por lo que esta es la mejor manera de saber si las hembras están listas para aparearse.

"Todavía hay tanto que no entendemos sobre la vida de los murciélagos", comentó Mariana. “Estábamos conduciendo en una carretera en medio del bosque y percaté un olor muy fuerte cerca de una de las tuberías de drenaje bajo la carretera. Descubrimos que lo habitaba un grupo completo de murciélagos machos y que todos tenían costras olorosas y testículos grandes. ¿Por qué estaban allí juntos y qué estaban haciendo? A veces las aves macho, por ejemplo, los saltarines, se juntan y bailan o cantan para atraer a las hembras. Quizás estos machos atraen a más hembras con un olor más fuerte si se agrupan, pero aún no tenemos idea”.

Mariana continuará ajustando las condiciones del diseño de nuevos experimentos basados en sus experiencias previas y observaciones recientes de murciélagos de labios con flecos en la naturaleza, hasta que resuelva el misterio de este rasgo oloroso complejo.